Las Medidas Económicas de Chavez

Sin duda, el gobierno de Hugo Chavez está desesperado. Desde el anunció de las medidas económicas, lo cual sucedió el 11 de junio, se desenmascara el “coqueteo” que tiene con sectores económicos, sobre todo de capital transnacional desde hace un tiempo atrás.
Ya nos acercamos a 10 años del régimen, y encontramos con una pobreza cada día más evidente. Ineficiencia, corrupción y despilfarro son las características de la gestión del “comandante”.
En vista de ello, busca “lavar su cara” con el anuncio de las recientes medidas económicas. Al sentirse sin escapatoria y un inminente fracaso electoral intenta recuperarse para noviembre y a través de presentar algunos logros en materia económica. Es por ello que vimos y escuchamos los anuncios en el llamado plan de “reimpulso de la economía”.
Este plan contempla recuperar la producción nacional, la cual el gobierno admitió, al fin, como causante de los altos niveles de inflación. Lo más relevante del plan fue la creación de un “fondo para el desarrollo de sector productivo” esto cuenta con $ 1.000 millones. También anunció la eliminación de ITF, lo cual califico de impuesto regresivo (también el iva, por si no lo sabía).
En materia agrícola se está elaborando la "Ley de Refinanciamiento agrícola” que no es más la negociación de plazos, tasas y nuevos créditos a los productores que enfrenten problemas de pago; como lo dijo el ministro Jaua “no es un borrón y cuenta nueva”.
También autorizó la importación a todas aquellas empresas registradas previamente a la fecha del anuncio, por montos iguales o inferiores a $ 50.000. Lo cual es excluyente y beneficiará a aquellas empresas con buena relación con el gobierno y conocedores de antemano del anuncio.
Tres semanas después vemos que estas medidas se han convertido en una serie de dadivas populistas, y fácilmente se pueden calificar de enmarcadas en la coyuntura electoral venidera. No existe una verdadera voluntad de llamar a todos los sectores para sentar las bases una economía para el desarrollo, soberanía y el progreso social. A las reuniones han sido excluidos ciertos sectores del empresariado nacional.
Vemos como gremios empresariales aliados al régimen buscan “pescar río revuelto” al servir de intermediarios entre pequeños empresarios y el gobierno para presentar sus proyectos. Algunos gremios de trabajadores están pidiendo su parte al presentar un proyecto de reactivación de Venezuela Movil, bajo la modalidad de “Empresa Socialista”, aunque el esquema sea un capitalismo de estado. El sector transporte no se queda atrás y pide por también la renovación de la flota, en lugar de pedir reivindicaciones para los trabajadores del volante.
No hay evidencias por ningún lado de una política que convierta al petróleo en pilar para el desarrollo diversificado. Ni una política agroalimentaria que solvente el grave problema de desabastecimiento y alto costo de los alimentos, 46% de inflación en los alimentos en un año demuestra el deterioro de poder adquisitivo de los más pobres.
A pesar de este panorama, la inexistencia de una política social eficaz que atienda las emergencias de miseria y pobreza que vive la inmensa mayoría de la población, es total. No es coincidencia que el Fondo Monetario vea los subsidios como una práctica nociva en estos momentos de crisis. El gobierno no ha nombrado ninguna acción que busque paliar la situación de miseria que viven millones de venezolanos, pero sigue despilfarrando inmensas cantidades de dinero de los venezolanos y sus más cercanos cómplices, actuales o antiguos, disfrutan de grandes riquezas producto del saqueo nacional.